¿Arrendar o comprar coche?

Te invitamos antes que nada a analizar los propósitos que le darás al automóvil, así como también, calcular el valor de depreciación durante el contrato y cotejar las tasas de interés.

Si deseas tener un auto nuevo sin que implique realizar una fuerte erogación monetaria de un solo golpe, podrías considerar adquirirlo mediante el modelo de arrendamiento, el cual es positivo por los beneficios fiscales que ofrece, tanto para personas físicas con actividad empresarial, como para personas morales por el beneficio principal de la deducibilidad, además de que puedes estar estrenando auto nuevo cada 3 ó 4 años sin importar la depreciación.

Generalmente con un crédito automotriz, una persona física debe dar un enganche del 20% y pagar por el resto del valor en plazos que pueden ser desde los 12 meses hasta los 60 meses, más los intereses. En cambio, en el arrendamiento, aunque no hay un enganche como tal, se hace un pago de una renta inicial solamente y rentas fijas durante un plazo que puede ser desde los 12 meses hasta los 48 meses y al final del periodo se puede comprar el vehículo por un valor residual o devolver la unidad y adquirir una nueva.

En cambio, si un asalariado opta por este esquema, debe comparar la tasa de interés que cobra el banco respecto a lo que cobra la arrendadora.

TIPS

Considera los plazos. Si eres de los que gustan de cambiar auto en un periodo de 2 a 3 años, el arrendamiento es ideal. Para lapsos más largos, analiza el monto total que pagarás.

Estima las cantidades. Haz una estimación del monto del enganche si quisieras comprarlo, o de la mensualidad que podrías pagar.

Depreciación. Si planeas comprar cuando termine el periodo de arrendamiento, considera la depreciación con base en el kilometraje y el mantenimiento del vehículo.

Considera el incentivo fiscal que te brinda el arrendamiento.

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